La república del dragón

La República del Dragón comienza justo cuando finaliza la entrega anterior. Sin embargo, aunque la guerra ha finalizado, vamos a encontrar nuevos conflictos entre los líderes políticos del Imperio. Algunos aliados del propio Imperio y algunas provincias que lucharán para establecer una República en la que sus líderes sean elegidos de manera democrática. En este panorama, encontramos a nuestra protagonista Rin. Rin y los Cike luchan… no para buscar un mejor futuro para su país, sino por pura venganza contra la emperatriz y las atrocidades que ha cometido contra ellos y otros chamanes. Como en el primer libro, Rin me ha puesto nerviosa por momentos. Aunque entiendo sus motivos, actúa sin pensar, es caprichosa, no tienen en cuenta las consecuencias de sus actos y puede llegar a ser injusta con las personas que se preocupan por ella. No obstante, es una mujer realmente fuerte cuya evolución es evidente y, a pesar de todo, ha luchado por su futuro. Los personajes secundarios son increíbles! Incluso los que me caen mal, me parecen brillantes. A los “buenos” los querrás profundamente y a los “malos” los vas a odiar con toda tu alma. La autora ha sabido desarrollarlos de manera impecable para que los conozcamos más en profundidad. Por otro lado, debo destacar la cantidad de temas que se tratan en este libro: estrés postraumático y sensación de culpa que sufren los soldados cuando vuelven de la guerra, violencia, la presión familiar, colonización, religión, racismo y un largo etc. Y el final… este final me ha dejado con la cabeza hecha polvo! Un giro que no podía esperar y la decepción que he sentido al leer lo que hacen algunos de los personajes. No puedo dejar de recomendar esta historia.

Muy buena secuela que mejora en todo a su primera entrega. La protagonista mejora muchísimo y deja un final abierto para un tercer libro q pinta increíble

Espectacular